La Tetralogía de Fallot es una de las cardiopatías congénitas más comunes y complejas, que afecta a los recién nacidos y que, si no se trata adecuadamente, puede poner en riesgo la salud y la calidad de vida del paciente. Esta condición se caracteriza por cuatro defectos cardíacos que alteran el flujo sanguíneo normal en el corazón: una comunicación interventricular (agujero entre los ventrículos), desplazamiento del tabique interventricular, obstrucción en el origen de la arteria pulmonar e hipertrofia del ventrículo derecho.
En los corazones de los bebés con Tetralogía de Fallot el flujo sanguíneo hacia los pulmones está disminuido, lo que dificulta la oxigenación de la sangre. Como resultado, los niños pueden presentar una coloración azulada en la piel (cianosis) especialmente durante actividades que demandan esfuerzo como llorar o alimentarse. Esta falta de oxígeno puede generar complicaciones a largo plazo si no se interviene a tiempo.
Últimas publicaciones
Cardiopatías congénitas, ¿La respiración rápida es una señal de alerta?
04 febrero, 2025 - 8 min de lectura
Leer noticiaCardiopatías congénitas: Problemas con la alimentación como síntoma clave en el diagnóstico temprano
04 febrero, 2025 - 8 min de lectura
Leer noticiaFatiga en pacientes con cardiopatías congénitas: no descuides este síntoma
04 febrero, 2025 - 8 min de lectura
Leer noticia