Cenas navideñas: cómo proteger tu salud digestiva

La Navidad es sinónimo de unión, celebración y mesas llenas de platos que solo vemos una vez al año. Es normal querer probarlo todo: los postres de la abuela, los buñuelos aún tibios o el brindis con amigos. Sin embargo, diciembre también es la época en la que más se disparan las consultas por indigestión, reflujo, dolor abdominal o malestar general. Y la razón es simple: solemos comer más rápido, en mayores cantidades y a deshoras, además que aumentamos el consumo de alcohol.

El Dr. Geovanny Hernández, gastroenterólogo de LaCardio, nos explica, durante estas celebraciones “vemos un mayor consumo de comidas copiosas y principalmente de alcohol. El riesgo que puedes tener es incrementar síntomas digestivos, más síntomas de maldigestión, el cuerpo no está diseñado para procesar tantos excesos seguidos y, cuando lo forzamos, termina manifestándolo”.

Aun así, disfrutar de la temporada sin sentirnos pesados o inflamados es posible. La clave está en esos pequeños hábitos que podemos aplicar, incluso en medio de las celebraciones festivas. Comer despacio, elegir solo lo que realmente nos gusta, alternar alimentos livianos entre celebraciones y mantenernos hidratados son acciones sencillas que hacen un gran cambio. Además, el Dr. Hernández recomienda “minimizar el consumo de alcohol, evitar alimentos muy grasos y evitar el dulce en exceso”, ya que estos suelen ser los principales detonantes de malestar en nuestro cuerpo.

Otro aspecto importante en estas fechas es el sueño. Entre reuniones, novenas y compromisos, dormir bien pasa a un segundo plano, pero el descanso influye directamente en cómo digerimos. Mantener horarios razonables y permitirle al cuerpo recuperarse mejora la tolerancia a las comidas y reduce las molestias típicas del mes.

¿Quiénes deben tener un cuidado especial en estas festividades?

Quienes padecen enfermedades crónicas, problemas cardiacos o que toman medicamentos inmunosupresores necesitan prestar más atención a la calidad, cocción y manipulación de los alimentos. En palabras de nuestro especialista, el Dr. Hernández, “deberían tener un mayor cuidado en el tipo de alimentos que consuman… para evitar riesgo de gastroenteritis infecciosa o intoxicaciones alimentarias”. Para estas personas, evitar preparaciones crudas, alimentos de larga exposición en la mesa y el exceso de alcohol es fundamental.

¿Qué síntomas deben generarnos alerta?

Si bien la mayoría de los síntomas digestivos leves desaparecen tras unos días, hay señales que indican que es momento de consultar al gastroenterólogo. El Dr. Hernández nos advierte que estos síntomas deben generarnos alerta “síntomas que persistan, la pérdida de peso, el cambio en el apetito, el sangrado en la deposición, el vómito con sangre o el dolor abdominal continuo”. Estos pueden ser signos de que hay algo más que un simple exceso festivo.

Además, es importante evitar la tentación de recurrir solo a remedios caseros, ya que estos pueden enmascarar síntomas, irritar más nuestro estómago o retrasar un diagnóstico oportuno. Cuando el cuerpo nos envía señales claras, lo más adecuado es consultar a nuestros especialistas, para que ellos puedan evaluar la causa real y ofrecerte un tratamiento adecuado.

Diciembre es una época para celebrar y disfrutar con equilibrio. Escuchar nuestro cuerpo y hacer elecciones más conscientes no significa renunciar a las tradiciones, sino vivirlas sin consecuencias incómodas. Con pequeños cambios, es posible gozar lo que tanto nos gusta y, al mismo tiempo, cuidar nuestra salud digestiva durante toda esta temporada.

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